Con 86 votos a favor y 42 en contra, la iniciativa promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador fue avalada.
El Senado de la República aprobó esta mañana, en lo general, la reforma constitucional que permite el traspaso de la Guardia Nacional (GN) a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Con 86 votos a favor y 42 en contra, la iniciativa promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador fue avalada, en medio de una fuerte oposición que calificó el cambio como la consolidación de la militarización del país.
La reforma, que contó con el apoyo del senador panista Miguel Ángel Yunes Márquez, alineado con Morena y sus aliados, modificó varios artículos de la Constitución, entre ellos los artículos 13, 16, 21, 32, 55, 73, 76, 78, 82, 89, 123 y 129. Además, otorgó a la Guardia Nacional la facultad de investigar delitos, una medida que ha generado polémica por su alcance.
El dictamen establece que “la investigación de los delitos corresponde al Ministerio Público, a las policías y a la Guardia Nacional, en el ámbito de su competencia, las cuales actuarán bajo la conducción y mando de aquél en el ejercicio de esta función”.
La discusión, que se extendió por 8 horas con 39 minutos en una sesión iniciada la noche del martes, se caracterizó por el enfrentamiento entre los legisladores oficialistas y los partidos de oposición, como el PAN, PRI y Movimiento Ciudadano, quienes votaron en contra y señalaron que esta reforma profundiza el papel de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública, alejando a la Guardia Nacional de su carácter civil.